En la ciudad de Apucarana en el estado de Paraná – existe una iniciativa de recolección de de lámparas fluorescentes debido a que estas contaminan el medio ambiente. El trabajo consiste en montar un punto de recolección en una zona estrategica de la ciudad, en una de las plazas principales. Este trabajo se realiza todo segundo sabado de cada mes. El proyecto fue implantado para evitar que la población arroje estas lámparas en cualquier parte o a la basura común. Este proyecto en su fase de inicio ha logrado alcanzar la meta de 2000 lámparas recolectadas por mes.
El responsable por este trabajo es el microempresario y electricista industrial Junior Muniz Dias que tiene su debido permiso de la empresa que colecta los estos residuos por todo Brasil. La máquina utilizada funciona en un tambor grande adaptado, las lámparas son colocadas en una especie de tubo donde son trituradas. En este proceso son separados el vapor de mercurio, el vidrio y otros residuos (pedazos de aluminio, polvo fosfórico y piezas de metal). "Cuando las lámparas son descartadas sin el debido cuidado, el vapor de mercurio va para el suelo, y con el tiempo puede contaminar el agua y toda la cadena de alimentos" afirma Junior, son efectos a corto y mediano plazo.
Para el abogado Celso Alves, "esta es una forma de incentivar al reciclaje porque la preservación del ambiente es de extrema importancia y no podemos esperar que estas iniciativas partan siempre del poder público". Celso agrega "hay muchas personas que ni siquiera separan la basura en casa". Para el Sr. Vidal opina que la concientización sobre el medio ambiente pasa necesariamente por la educación, "tenemos que difundir estas ideas en las escuelas y así alcanzar un resultado mas eficiente, porque el adulto es un poco mas difícil de concientizar".
En cuanto al tema del reciclaje, Venezuela , desde todo punto de vista, se encuentra en un gran atraso con respecto a Brasil, en este sentido, la ciudad de Curitiba (Brasil) es un modelo mundial con respecto a este tema de hecho es denominada la ciudad ecológica de Brasil. Curitiba posee una gran infraestructura para el recliclaje de basura, y hay una fuerte cultura del reciclaje.
Primordialmente se debe comenzar con Educación, crear cultura de reciclaje que por supuesto no existe en Venezuela y para ellos se debe tomar en cuenta a las escuelas como fuente principal de difusión de este tipo de informacion ya que los niños serian excelentes multiplicadores.
La mayoría de las personas no tenemos conciencia del daño que se le causa al ambiente cuando desconocemos esta información que es, me atrevo a decir, simple. Por la simple falta de difusión de información estamos contribuyendo de manera inconsciente al deterioro del medio en el que vivimos.